MALÉFICA

Después de haber reflexionado en clase sobre la película, comentar con las compañeras y darme cuenta de los mensajes que se plasman a lo largo de la trama, el personaje de la película con el que me siento más identificada es la protagonista, Maléfica.

Maléfica era un hada feliz y contenta que vivía en armonía rodeada de seres fantásticos y la naturaleza. Un día aparece un chico y se deja llevar por el amor de este mortal. Confía en él, él se quita su anillo de metal para poder estar con ella y se establece un vínculo muy especial entre ambos. Sin embargo, la ambición del chico por llegar al trono de su reino, está por encima de esta unión de amor verdadero y quitándola sus alas para conseguir su fin, la hiere. Maléfica se llena de ira y rencor y trama su venganza. Cuando se entera del bautizo de la hija del rey se presenta allí, humilla a este y le hecha una maldición a la princesa Aurora: serás una niña guapa, inteligente y feliz pero a los 15 años morirás pinchándote con una rueca a no ser que recibas un beso de amor verdadero. Sin embargo, vemos como Maléfica sigue teniendo su parte buena y es incapaz de dejar que esta niña se crie sola. Su amor por la pequeña es tan fuerte que podrá salvarla del hechizo.

Si nos fijamos en las reacciones de Maléfica ante cada una de las situaciones, podemos sentirnos muy identificados con ella. Durante nuestra niñez y adolescencia muchas veces nos enamoramos y confiamos en alguien pensando que siempre estará a nuestro lado. Luego descubrimos que esto no es así, nos hacen daño y nos llenamos de furia y dolor pudiendo no solo afectarnos a nosotros sino también a las personas de nuestro alrededor (como vemos reflejado en la película en el cambio que experimenta el reino de Maléfica cuando ella es engañada). Esa decepción y frustración que tenemos dentro por el daño causado nos genera rencor que más tarde dejamos salir haciendo cosas que en otras condiciones no haríamos. Sin embargo, con el tiempo nos recuperamos y volvemos a ser los mismos. Así, debajo de la furia de Maléfica esta aquella niña feliz que disfruta con los demás y cuida de ellos.

Esta película está basada en La bella durmiente y ha sido adaptada al contexto actual. Uno de los cambios que más me ha gustado es el final. Aurora solo despertará de su hechizo con un beso de amor verdadero. Estamos acostumbrados a que este beso siempre sea del príncipe pero en esta película no es así. El amor más verdadero que hay no tiene por qué provenir del chico o chica que nos quiere, sino que, es mucho más fuerte el beso de la persona que siempre ha estado a nuestro lado cuidándonos y protegiéndonos de verdad.

Es una película llena de símbolos, sentimientos, actuaciones, comportamientos… que da para pensar como trabajar en el aula el asunto de las emociones, es decir, como conocerlas y gestionarlas.

MARÍA RAPOSO